El marketing de proximidad es una forma de marketing experiencial que se enfoca en la elaboración de estrategias que emplean nuevas tecnologías para el envío de información o contenido relevantes directamente a los smartphones de los usuarios que se encuentren cerca físicamente del punto emisor. Habitualmente, los datos se transmiten a través de la tecnología Bluetooth.
De forma general, el marketing de proximidad se apoya en tres pilares ineludibles que dan forma a la estrategia. En primer lugar, debe activarse cuando el usuario en cuestión esté en el radio de acción de la tienda. En segundo lugar, debe tratarse de una campaña personalizada, es decir debe ofrecer un contenido acorde a las necesidades del cliente. En tercer y último lugar, debe ser algo efectivo, rápido y lo menos intrusivo posible.
La aparición del proximity marketing o marketing de proximidad es posible hoy en día gracias a la existencia de los modernos smartphones que incluyen tecnologías como el Bluetooth, la Geolocalización, los beacons o los códigos QR, así como la generalización de los puntos de acceso Wi-Fi.
En resumidas cuentas, podríamos decir que este tipo de marketing permite establecer una relación muy estrecha con el usuario, donde se produce una conversación dinámica entre el consumidor y la marca basada en las necesidades reales del usuario, que se sustenta en el aporte de valor para la satisfacción de necesidades concretas.
Pese a tener algún que otro parecido entre ellos, no debemos confundir el marketing de proximidad con el marketing de geolocalización, ya que este último recurre única y exclusivamente a la tecnología de geolocalización para activarse. Por su parte, el marketing de proximidad posee muchos más medios para detectar a los posibles consumidores y desarrollar así las estrategias más adecuadas para él.
Otras definiciones: proximity marketing